Las monodietas o dietas “de choque”, son dietas monótonas consistentes en comer durante todo el día lo mismo, ya sean frutas, vegetales u otros alimentos. Estas dietas aportan pocas calorías diarias, provocan una pérdida de peso considerable en poco tiempo. El único fin de las monodietas no es la pérdida de peso pues también se recomiendan para realizar una limpieza del organismo, siempre bajo supervisión de un especialista y solo por dos o tres días.
Podríamos realizar una monodieta bebiendo caldo de verduras casero, hirviendo un litro y medio de agua con ½ col, 2 alcachofas, 1 rama de apio, 2 zanahorias, 1 cabeza de ajos, 1 cebolla y 2 patatas. Es muy depurativo y buenísimo para el riñón y el higado.
Se pueden variar un poco los alimentos para que no sea tan monótono, por ejemplo en el almuerzo tomar solo zumo de piña o de pomelo, para la comida alcachofas, para la merienda zumo de piña o pomelo y en la cena alcachofas. Debe ser la fruta y la verdura mas depurativa, así es más fácil pasar el día. También se suele recomendar pasar todo un día comiendo fresas o uvas negras.
Existe también como dieta depurativa y para perder peso, el ayuno, la privación de todo alimento sólido o líquido, durante un periodo de tiempo, con fines higiénicos o curativos. El ayuno solamente admite agua pura, sin gas ni cloro. Los ayunos a base de zumos de fruta o de legumbres reciben el nombre de hidrodietas. En las sociedades desarrolladas se come tres veces más de lo que el cuerpo necesita. Esta sobrealimentación provoca sobrecarga y aumento de la acumulación de toxinas en el organismo, favoreciendo la enfermedad. Así pues, ayunar un día a la semana no va a causar ningún tipo de problema y resulta un buen modo de purificar y desintoxicar el organismo. Sólo pueden aparecer ligeras molestias como mal sabor de boca, ligera debilidad y exceso de sueño. Se recomienda que durante el día dedicado al ayuno no se ejerza ninguna actividad física o mental excesiva. Durante el ayuno ha de beberse toda la cantidad de agua que una persona necesite. Por lo general, entre litro y medio a cuatro litros. El agua ayuda a drenar hacia el exterior todas las impurezas y toxinas, favoreciendo la eliminación de cuerpos cetónicos y el intercambio celular.
Como hemos dicho anteriorimente, este artículo es solo informativo, para realizar estas dietas o cualquier otra, se debe ir primero a un especialista, puesto que como todo, tiene contraindicaciones, y cada persona y organismo es diferente. No es aconsejable realizar estas dietas si eres diabético o estás embarazada.
Génesis Gutiérrez
