Seleccionar página

Insomnio        El insomnio puede ser uno de los efectos del cambio de horarios. Venimos de vacaciones, tenemos el cuerpo acostumbrado a dormir tarde y levantarnos con tranquilidad en las mañanas, y de pronto, la vuelta al trabajo obliga a madrugar. El problema puede aparecer cuando queremos acostarnos tempranos pero el sueño no llega.

            Tal y como estudiamos en nuestros cursos de naturopatía, la función del sueño está regulada por el organismo a través de las hormonas, nuestro cuerpo acostumbra a segregar melatonina a determinada hora del día. Es por esto que a cierta hora nos entra el sopor del sueño, y si no nos acostamos y pasa ese momento, después ya nos despabilamos. Pues bien, la secreción de melatonina se adapta a nuestras costumbres, si todo los días nos acostamos tarde, cuando queremos irnos a la cama temprano, resulta que nuestro organismo todavía no segrega la melatonina y eso puede retrasar la venida del sueño, empezamos a ponernos nerviosos en la cama, a dar vueltas y finalmente ya no nos podemos dormir, con el consiguiente cansancio para el día siguiente en el que el despertador sonará tremendamente pronto para una noche de poco sueño.

 ¿Cómo podemos volver a regular nuestro sueño?

             Una de las maneras en que podemos ayudar a acostumbrar a nuestro organismo a dormirse pronto es la toma de melatonina. La melatonina, como hemos dicho es la hormona del sueño, tiene un efecto inductor del relax que propicia el sueño y la fase REM donde el descanso es más profundo. Bien, podemos tomar melatonina para acostumbrar a nuestro cuerpo a que el sueño nos venga más temprano.

 Modo de uso de la Melatonina

               Es muy importante, tal y como estudiamos en nuestros cursos de naturopatía, el modo de tomar la melatonina, sino, puede que no tenga ningún efecto. Recordemos que la toma de melatonina es para acostumbrar a nuestro organismo al nuevo horario, por tanto, es muy importante acostarnos siempre a la misma hora y crear una rutina, por ejemplo, a las 11 horas de la noche, apagamos casi todas las luces de la casa, dejando una iluminación muy tenue, con el pijama ya puesto, tomamos algo caliente (lo ideal sería una infusión), la melatonina y hacemos una actividad relajante, ver la tele con el volumen suave, oir la radio, leer un poco, y a los 15, 20 minutos a dormir. Si creamos una rutina, y nuestro cuerpo ve que siempre a la misma hora y con la misma rutina los niveles de melatonina en sangre aumentan, en cuanto retiremos la melatonina, será nuestro cuerpo quien, acostumbrado a tener a una hora determinada y en dicha situación, los niveles más altos de melatonina, enviará una señal a la epífisis para que segregue melatonina. Y es así como habremos conseguido regular nuestro sueño.

             Si por el contrario tomamos la melatonina cada día a una hora, y sin crear una rutina, nos ayudará a dormir, por supuesto, pero el día que no la tomemos no vendrá el sueño. Es importante, como siempre estudiamos en el curso de naturopatía que no perdamos de vista que lo importante es ayudar al cuerpo para que él solo se pueda equilibrar y funcionar correctamente, no hacer depender a nuestro organismo de sustancias que tomamos de manera externa, sean naturales o no.

                                            Feliz descanso a todos!!

                                                                             Rosana Ferre Blanquer